Se trata de una enfermedad inflamatoria crónica en la zona media de la cara que afecta generalmente a mujeres y a personas de piel clara. Sí hablamos de la rosácea, síntomas y tratamientos para paliar sus efectos.
La rosácea es una enfermedad crónica de la piel caracterizada por la aparición de espinillas, enrojecimiento de la dermis, principalmente en la zona de la cara y, a veces incluso afecta a los ojos.
Aunque también se da en hombres, son sobre todo las mujeres, las que sufren los efectos de esta enfermedad cutánea. Principalmente si son de tez más clara. ¿El motivo? Aún se desconoce.
Lo que si se sabe, es que hay factores que pueden llegar a desencadenar en rosácea como temperaturas extremas, bebidas alcohólicas, estrés y comidas picantes.
Rosácea: síntomas más comunes
Entre los síntomas de la rosácea destacan los siguientes:
- Enrojecimiento en el centro de la cara, que puede ocurrir ocasional o permanentemente.
- Dilatación capilar: pequeños vasos sanguíneos o capilares que están dilatados y visibles a través de la piel.
- Pápulas y pústulas: lesiones similares a las del acné.
- Alta reactividad y sensibilidad de la piel, ardores, picores, edemas...
Tratamientos para la rosácea y sus síntomas
¡Toma nota! Te hablamos de los síntomas y tratamientos de la rosácea:
Limpieza
Súper importante evitar el uso del agua muy caliente, ya sea en la ducha o si nos hacemos un baño, así como en saunas. Y, usar para ello productos de limpieza suaves específicos para pieles sensibles o con rosácea.
¡Ah! Y se nos olvidaba, nada de exfoliar la piel o someternos a peelings. La piel con rosácea es muy sensible y esto podría irritarla aún más.
Hidratación
Para el confort de la piel, es muy importante utilizar una crema específica. ¿Por qué? Porque ayudará a reponer mucha agua y a prevenir irritaciones, picor y ardor de la piel.
Las cremas contribuyen a que la barrera cutánea esté sana y fuerte, con lo que conseguiremos proteger mejor de la irritación.
Protección
Lo ideal es evitar la exposición al sol, ya que esto puede agravar la lesión.
Sabemos que esto puede llegar a ser muy complicado, por ello (una vez más) os recordamos la importancia de usar siempre protección solar alta. Incluso en días nublados e invierno.
Alimentación adecuada
¡Comer bien es fundamental! Para ello, recurriremos a una dieta saludable rica en vitaminas (especialmente C y D) y baja en alimentos y las grasas picantes. Así como el café, el alcohol y el tabaco.
Aunque la rosácea es una enfermedad crónica que, hasta la fecha, no tiene cura, siguiendo estos consejos y los tratamientos recomendados por los dermatólogos, podemos paliar sus síntomas y apenas sentir sus efectos.