Es una enfermedad de la piel que afecta tanto a niños como adultos, caracterizada por el picor, sequedad y enrojecimiento. Además de la aparición de posibles brotes causados por cambios bruscos de temperatura, malos hábitos en la rutina... ¿No sabes como cuidar la piel atópica? Sigue leyendo, que te lo contamos.
Brotes en piel con atopía
Los cambios de temperatura y el día a día de nuestra de higiene pueden influir mucho en la salud de nuestra piel. Cuando hace frío, por ejemplo, tendemos a usar agua muy caliente cuando nos duchamos, lo que afecta negativamente a la piel, sobre todo si tenemos dermatitis atópica. Y eso provoca que la piel se enrojezca, se reseque y pique. Hay factores como estos que pueden afectar:
- Productos con capacidad de irritar la piel sensible, como detergentes, jabones, baños de burbujas, etc.
- Alergias (al polvo, polen, distintos hongos…).
- Ciertas fibras sintéticas en la ropa.
Qué hacer para cuidar la piel atópica
Esta serie de factores necesitan de una consecuente serie de cuidados para prevenir o curar la piel atópica:
- Abrigarnos demasiado puede ser perjudicial. Especialmente a los niños se trata por todos los medios de abrigarles demasiado para que no cojan frío. En muchas ocasiones, acaban sudando y perjudica a la piel. Más aún si ya está dañada.
- Secar la piel con cuidado. Lo más aconsejable es utilizar toallas de algodón y sin frotar para evitar dañar e irritar las zonas afectadas.
- Evitar el roce de las prendas sintéticas. Se recomienda elegir prendas de algodón y evitar los sintéticos y las lanas que tienden a provocar reacciones alérgicas en la piel.
- No se recomienda el uso de suavizantes.
- Hay “jabón sin jabón” (también llamado “jabón syndet”) tipo gel, cremas de ducha, o aceites de ducha, cada uno con un nivel de emoliencia diferente, ya que es posible que tu piel te pida uno u otro en diferentes momentos.
- Mantener un ambiente húmedo en las habitaciones. Para evitar la excesiva sequedad de la piel, se aconseja mantener los interiores húmedos, especialmente durante el invierno por el uso de la calefacción.
- Es muy importante proteger la piel de los rayos del sol durante todo el año, además de hacer especial atención a las zonas más sensibles.
Recomendación farmacéutica para la piel atópica
Además de seguir estos hábitos de cuidado, el uso de productos dermatológicos adecuados es clave para mantener la piel hidratada, calmada y protegida. Estas son algunas de las fórmulas más eficaces:
Eucerin Atopicontrol: ideal para pieles con tendencia atópica. Contiene omega-6 y licocalcón A, ingredientes que calman la irritación y reducen el picor, fortaleciendo la barrera cutánea.
La Roche-Posay Lipikar Baume AP+M: su fórmula con manteca de karité, niacinamida y el exclusivo Aqua Posae Filiformis ayuda a reequilibrar el microbioma cutáneo y aliviar la sequedad extrema.
Avène Xeracalm A.D: con tecnología I-modulia®, reduce el picor y las irritaciones provocadas por la sequedad, aportando confort incluso en brotes activos.
A-Derma Exomega Control: su extracto de avena Rhealba limpia e hidrata suavemente mientras refuerza las defensas naturales de la piel atópica.
Estos productos son recomendados tanto para adultos como para niños y bebés, y pueden integrarse perfectamente en la rutina diaria de higiene y cuidado corporal para mejorar la calidad de vida de quienes padecen dermatitis atópica.



































