¿Quieres saber qué tomar para los gases? Son muchas las personas que sufren a diario o habitualmente de problemas de gases y las numerosas molestias que estos comportan. Y aunque este problema puede tener un origen genético, en la mayoría de casos se trata de desórdenes provocados por malos hábitos o una mala alimentación.
Además de corregirlos, puedes recurrir a la gran cantidad de medicamentos para los gases que existen, de probada efectividad, que pueden ayudarte a recuperar tu calidad de vida a la vez que le pierdes el miedo a las digestiones. En Incapto te hablamos sobre los gases y su tratamiento.
Descubre qué tomar para los gases
Si has descartado la posibilidad de sufrir una enfermedad que requiera de atención médica, puedes tratar tus excesos de gases mediante la ayuda de medicamentos especialmente diseñados para ello.
- Aero-Red, en su versión tanto Forte como estándar, es uno de los medicamentos más populares dentro de esta categoría, encontrándose tanto en cápsulas blandas en su versión Forte como en comprimidos masticables.
- Iberogast, en forma de gotas orales, también resulta uno de los medicamentos para los gases más conocidos.
- Y, sin embargo, no son los únicos: Simeticona Normon, Imonogas o el carbón vegetal de Arkopharma son también buenas opciones disponibles para cualquiera.
Cómo actúan los medicamentos para los gases
Los medicamentos para los gases, que se presentan habitualmente en forma de pastillas o comprimidos que tomar oralmente, actúan tanto remediando las bolsas de gases formadas como previniendo la propia formación de estas, sobre todo en el intestino. La dimeticona es uno de los más usados aunque no el único, y actúa rompiendo las burbujas que retienen los gases, facilitando así al organismo su eliminación. El carbón vegetal activado, por otro lado, absorbe las partículas del exceso de gases, además de actuar como antidiarreico, y otros componentes como la alfa-D-galactosidasa o las pastillas de lactasa ayudan a la digestión del alimento, reduciendo los gases producidos por fermentación. Todos ellos reducen la hinchazón y el dolor abdominal, siendo idóneos para el tratamiento del exceso de gases.
Cómo tomar los medicamentos para los gases
Cada producto incluye su propio prospecto con sus instrucciones de uso y recomendaciones, que deben respetarse siempre. Aun así, si sientes cualquier molestia o malestar fuera de lo habitual al tomarlos, detén de inmediato la medicación y acude a un especialista.
¿Por qué tengo gases?
Para comprender qué significa exactamente la aparición de flatulencias o acumulaciones de gases conviene entender lo que los origina. Los gases intestinales son, como tales, una de las afecciones más comunes del sistema digestivo, quizás junto al reflujo y el estreñimiento. Las flatulencias muy rara vez representan un problema de salud grave o una amenaza para esta, pero sí comportan toda una serie de molestias que, si uno se ve obligado a soportar habitualmente, pueden suponer un notable descenso en la calidad de vida. Los gases pueden originarse en los intestinos o en el estómago. Suelen darse a causa de la fermentación de distintos componentes del alimento, aunque en ocasiones son simples bolsas de aire a causa del aire tragado al comer y beber. Una parte de hasta el 15% del aire tragado, principalmente el oxígeno, es absorbido por la sangre presente naturalmente en el intestino delgado, aunque al hacerlo libera a cambio dióxido de carbono. Este gas, junto al oxígeno que la sangre no ha podido absorber, sigue su trayecto hasta el intestino grueso, donde se engrosa debido a los gases emitidos por la fermentación de las bacterias sobre los restos del alimento. Por otra parte, hay una buena cantidad de alimentos que están relacionados con el exceso de gases: los ricos en fibras, celulosa, grasas, proteínas o carbohidratos, así como los refrescos gaseosos y, en general, cualquier comida demasiado copiosa, tiene muchas posibilidades de provocarnos un exceso de gases y, por tanto, también un efecto de distensión gástrica o intestinal. También afecta el estado de la flora intestinal de cada persona, que puede provocar que dos individuos con la misma dieta produzcan cantidades distintas de gases. Otras patologías o afecciones como el estrés, la ansiedad o la presencia de úlceras gástricas tienen también una gran influencia, o enfermedades como el síndrome del intestino irritable, que dificulta al intestino su labor de absorber los nutrientes de los alimentos y además provoca dolor.
Cómo evitar los gases
Además del uso de fármacos, hay algunos consejos que puedes tener en cuenta para ayudarte a evitar la acumulación de gases: Mastica bien y come despacio
- No bebas durante las comidas, o hazlo en poco volumen: es mejor beber antes o después.
- No bebas con pajita ni directamente de la botella, pues se traga más aire.
- Evita los carbohidratos.
- Procura andar alrededor de 15 minutos, a ritmo tranquilo, después de comer.
Bibliografía
Romero, C., & González, J. B. (2006). Antiflatulentos: revisión. Farmacia profesional, 20(11), 44-47.