La fiebre leve o moderada es la que no pasa de los 38 °C. Ahora bien, si los supera, es necesario incidir en ella para evitar ciertos síntomas que pueden acompañarla, más aún si se trata de grupos vulnerables como mujeres embarazadas, niños o pacientes con patologías pulmonares, cerebrales o cardiacas. En este artículo de Farmaciasdirect vamos a contarte qué tomar para la fiebre para que conozcas cuál es el mejor tratamiento para esta condición.
Síntomas de la fiebre
En el hipotálamo se encuentra una función termorreguladora que se encarga de mantener la temperatura constante en nuestro cuerpo. Sin embargo, cuando la temperatura aumenta por diferentes causas, aparece la fiebre. En general, se trata de una señal de que el cuerpo se encuentra combatiendo una infección o enfermedad.
Ciertamente, los síntomas pueden variar de una persona a otra, y estar condicionados por el tipo de enfermedad que provoca la fiebre. Por regla general, las personas suelen sentir dolor muscular generalizado o lumbar, dolor articular, dificultad para dormir o dolor de cabeza.
Cuando el centro termorregulador del que hablábamos hace que la temperatura del cuerpo se eleve, la actividad muscular aumenta y los escalofríos aparecen. Además, en el caso de las personas mayores, suelen padecer episodios de delirio o irritabilidad, mientras que los menores de 5 años pueden experimentar convulsiones.
¿Qué medicamentos tomar para la fiebre?
A la hora de tratar la fiebre existe una gran diversidad de medicamentos en el mercado. Para combatirla con efectividad, así como los síntomas que la acompañan, lo primero que hay que hacer es acudir al médico para detectar la enfermedad que lo está provocando.
Aquí te dejamos los mejores fármacos que tomar para la fiebre.
Paracetamol
Dentro de los fármacos más comunes para la fiebre están los antipiréticos o antitérmicos. Son los medicamentos más utilizados para acabar con la fiebre. Su finalidad es reducir el nivel de la temperatura corporal.
En nuestro día a día, solemos utilizar fármacos como el paracetamol, así como el ibuprofeno y la aspirina (ácido acetilsalicílico), que son antiinflamatorios no esteroideos. Los corticoides también se emplean para tratar la fiebre, aunque tienen demasiados efectos secundarios, por lo que únicamente son utilizados en casos de urgente necesidad.
El paracetamol cuenta con propiedades antitérmicas y, además de reducir la temperatura corporal, alivia el dolor. Se trata de un fármaco genérico, aunque forma parte de algunas marcas con las que todos estamos familiarizados como Gelocatil o Dolocatil.
El paracetamol es uno de los medicamentos más recomendados porque apenas hace daño al estómago por su escasa actividad antiinflamatoria. De hecho, las mujeres embarazadas o en periodos de lactancia también pueden utilizarlo, dentro de las especificaciones autorizadas por su médico.
Aspirina para la fiebre
La aspirina también calma el dolor y puede ser utilizada en procesos febriles. Se encuentra dentro de la categoría de los antiinflamatorios no esteroides y está indicado para mayores de 16 años. El ácido salicílico no es aconsejable en el caso de los pequeños al contener posibles efectos secundarios graves, como hemorragia intestinal.
Ibuprofeno
En cuanto al ibuprofeno, es empleado principalmente cuando el paracetamol no cumple su cometido efectivamente. Este fármaco funciona como antiinflamatorio, pero al mismo tiempo es analgésico para reducir el dolor y antipirético para controlar la temperatura corporal.
Algunos medicamentos que contienen ibuprofeno como principio activo, están especialmente indicados para niños a partir de 3 meses que presenten estado febril, como es el caso del Ibudol Pediátrico.
Apiretal
Apiretal es otro medicamento que trata el dolor leve o moderado y los estados febriles en niños y adolescentes. Está dentro del grupo de los analgésicos y antipiréticos, y la posología dependerá del peso del niño.
Ventajas de tomar medicamentos para la fiebre
No siempre es aconsejable tomar medicamentos al tener fiebre, únicamente cuando el paciente necesite sentirse mejor, aliviando así el dolor articular o muscular y la elevada temperatura corporal.
De ese modo, los medicamentos para la fiebre deben utilizarse cuando la temperatura llega a los 38º en el caso de los niños o 38,5 °C en adultos, no solo para aliviar ciertos malestares, sino para evitar la aparición de otros.
Causas de la fiebre
Cuando el sistema inmunitario del organismo se ve atacado por los organismos responsables de las enfermedades, reacciona para combatirlos y la fiebre aparece como respuesta a su estimulación.
Dentro de las causas más frecuentes que explican la aparición de fiebre destacan las siguientes:
- Algunos medicamentos en forma de anticonvulsivos, antishistamínicos y antibióticos.
- Infecciones bacterianas o virales.
- Determinados cánceres pueden producir fiebre.
- Insolaciones provocadas por el sol o causada por el calor emitido por una máquina o similar.
- Consumo excesivo de anfetaminas o sustancias psicotrópicas.
- Trastornos autoinmunes o inflamatorios.
- Tromboflebitis o proceso inflamatorio que forma coágulos de sangre.
Bibliografía:
- Herskovic, L. (1999). Tratamiento sintomático de la fiebre. Revista chilena de pediatría, 70(5), 431-432.
- Baulies, G. (2010). La fiebre. Aula de infantil.