Tener un pelo sano, hidratado y brillante es el resultado de darle a nuestro cabello la atención que necesita a partir de unos buenos hábitos en nuestro día a día. ¡Con esto no dudes que conseguirás una gran mejora!
Te vamos a enseñar unos trucos para que veas que puedes proponerte tener una melena mucho más fuerte y sin moverte de casa. Es importante tener en cuenta nuestro tipo de pelo, ya que este puede cambiar con el tiempo y con tus hábitos.
Los 9 trucos esenciales para tener el pelo sano
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Cepíllate correctamente. Un paso tan sencillo como cepillarte el pelo más de una vez al día. ¡Esencial aunque no lo parezca! Recomendamos dos veces al día, antes de lavártelo y por la noche antes de irnos a dormir. El hecho de que recomendemos este paso antes de lavártelo es porque así evitamos los enredos que se forman cuando ya nos lo hemos mojado, lo cual puede complicar que el champú llegue a todas las zonas. Además, cuando el cabello está húmedo es cuando más debilidad presenta, por lo que tenderá a romperse.
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La temperatura del agua. Aconsejamos un lavado con agua templada, esta ayudará a retirar por completo el exceso de producto como ocurre con los aceites. Remarcamos que templada y no fría, porque solemos tener dudas con qué temperatura es la adecuada, y la fría no nos disolverá la grasa. El agua caliente por su parte, nunca es buena, solo nos resecará el cabello. Eso sí, una vez nos hayamos enjuagado bien, sí nos tendríamos que pasar agua fría unos diez segundos para sellar la cutícula del pelo y estimular la circulación sanguínea, en definitiva, para conseguir un pelo más brillante.
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Un aceite. Las mascarillas y los acondicionadores son grandes aliados para nuestro cabello, pero los tratamientos que consiguen reparar la fibra capilar y sin cortar son los aceites. El aceite restaura el contenido de cada fibra capilar creando ese brillo de pelo sano que queremos para nosotros.
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Para los fieles a la mascarilla. Como bien sabemos, la mascarilla debemos de aplicarla sobre nuestro cabello dos veces por semana y dejarla actuar de 5 a 20 minutos antes de retirarla. Es muy importante que, si tienes tiempo, la dejes actuar más de lo habitual, sobre todo si estamos en verano, donde te recomendamos que, si te lo vas a lavar y después vas a bajar a la piscina, intentes no aclararte completamente el pelo de la mascarilla. Esto hará un poco de barrera e impedirá que el cloro penetre directamente.
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Corta las puntas. A pesar de la cantidad de cremas y tratamientos existentes para restaurar las puntas dañadas, lo mejor para estimular la oxigenación del cabello y evitar la sequedad, siempre va a ser un corte cada cierto tiempo para promover el fortalecimiento capilar de un pelo sano, aunque nos duela. Merece la pena.
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Protégelo del sol. La exposición prolongada al sol, al igual que no es recomendable para la piel, es mala para nuestro cabello, y puede provocar problemas como la caída del mismo. Para protegerlo puedes darle un tratamiento nutritivo una vez por semana, o bien adquirir cremas de peinado con filtro solar.
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Evita el estrés. Sabemos que en ocasiones puede llegar a ser difícil de controlar. Busca formas de relajación que encajen con tu día a día y tu estilo de vida si te sometes a situaciones de estrés con demasiada frecuencia. El estrés repercute en la salud capilar y puede provocar el aumento de la caída del cabello.
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Los ingredientes naturales. Los productos con miel, aceite de argán o aguacate. Si tienes el cabello maltratado o extremadamente seco, es un buen momento para que te aproveches del aguacate. Este repara y protege, ayuda al crecimiento, a la suavidad y al brillo de nuestro cabello.
Hoy en día podemos ver cantidad de ingredientes compuestos por las vitaminas que necesitamos para que nuestro cabello crezca sano. Un buen equilibrio de vitaminas del complejo B, D, E y H, son necesarias.
En concreto la vitamina B7, esencial para el crecimiento capilar y de las uñas. Como estas opciones, siempre existirán grandes suplementos, aunque nunca será mejor que tomarlas a través de alimentos. Algunos ejemplos de alimentos con vitamina B7 son el huevo, el pescado azul, los guisantes, las nueces y la levadura de cerveza.
Sin embargo, no por atiborrarnos de ellos vamos a apreciar una mejora inmediata. No existen los alimentos milagrosos, el truco está en mantener una dieta sana y equilibrada. Hay que comer de todo y evitar grasas para ver los resultados a largo plazo.
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Bebe más agua. El agua tiene un papel fundamental. Ayuda a hidratar de forma natural el pelo, previene el debilitamiento. Una medida ideal para un pelo sano estaría en los dos vasos por la mañana, dos al medio día, dos por la tarde y uno antes de dormir.